miércoles, 18 de febrero de 2015

18-2-2015 La composicion fotografica



 

Composición (I)

 Estamos hablando de algo tan importante en la fotografía como es la composición. Teóricamente hablando la composición es la forma en la que se ordenan los objetos vistos dentro del encuadre, es donde radica gran parte de la fuerza de una buena fotografía. Y quiero remarcar esto de principios y no reglas estos principios y como usarlos de la mejor manera posible para ayudar a dotar de fuerza a nuestras fotografías.

El centro de interés

El centro de interés es el elemento principal que queremos hacer destacar en la fotogra debe ser claramente identificable, y valga la redundancia atraer el interés del espectador
El centro de interés no tiene que estar necesariamente colocado en el centro de la foto ni ocupa la mayor parte de la imagen, simplemente debe ser el protagonista de la imagen y el que atraiga nuestra atención. En general hay tres zonas donde podemos colocar el centro de interés en nuestra fotografía:
·         Centro: estático, generalmente aburrido, apto si queremos transmitir calma y tranquilidad.
·         Cerca del borde: transmite tensión, puede resultar incomodo, normalmente necesitaremos alguna justificación para ponerlo ahí.
·         Ligeramente descentrado: es dinámico sin llegar a crear una gran tensión, es el más adecuado habitualmente para aportar interés a la imagen.

Las líneas Las lineas son elementos muy presentes en la fotografía, y que podemos usar como herramientas para dar fuerza a nuestra composición, guiar la vista del espectador y dar soporte a otros elementos dentro del encuadre.
Cuando hablamos de líneas no nos referimos exclusivamente a líneas plasmadas en el sentido literal de la palabra, una línea puede venir dada por una sucesión de puntos, por sombras, por espacios vacíos (espacio negativo), formas geométricas, etc.
 Las lineas pueden ser horizontales, verticales, diagonales, curvas o implícitas en la mirada. Cada tipo presenta unas características diferentes y aportan sensaciones distintas según donde y como las usemos.
Las líneas horizontales crean un patrón visualmente atractivo y la sudadera roja es el centro de interés de la fotografía.

 Encuadre El encuadre puede cambiar radicalmente las sensaciones que transmite nuestra fotografía. Por lo general el encuadre horizontal es más natural, ya que es como nuestros ojos ven el mundo, y da sensación de amplitud y serenidad, mientras que el encuadre vertical nos aporta más dinamismo.
   Encuadre horizontal: es el más usado por ser más natural da sensación de amplitud, serenidad y quietud. El campo visual del ser humano horizontalmente abarca unos 180 grados, verticalmente en cambio sólo unos 130 grados, por eso vemos en formato horizontal. Es el más usado en paisajes, street photography y en fotografía en general.

  Encuadre vertical: utilizamos sobre todo el encuadre vertical para objetos que son más altos que anchos. Con el encuadre vertical la fotografía transmite firmeza. En los retratos y las fotos arquitectónicas.. También las fotografías de paisajes lo usan en ocasiones, para incluir más primer plano y con ello aumentar la sensación de profundidad.

  Encuadre cuadrado: el encuadre cuadrado es el que nos aporta más estabilidad a la foto. Es equilibrado, y es muy interesante para fotos donde queramos transmitir mucha serenidad y quietud, pero debemos manejarlo con cuidado para que nuestra foto no caiga en el aburrimiento. Se utiliza mucho también unido a simetrías, por la misma razón.
Elegir el mejor encuadre para cada fotografía en cada momento esta en nuestra mano, y dependerá de lo que queramos transmitir con nuestra imagen. A veces será mejor optar por un retrato en formato horizontal, o por un paisaje en vertical, nosotros decidimos y para hacerlo de la mejor manera posible es útil conocer estos principios básicos.

Composición (II)

Hoy os hablaremos de una de las “reglas” más conocidas y usadas en fotografía para la composición, la regla de los tercios, y también otros dos conceptos muy relacionados con ella, la proporción áurea y la ley del horizonte 

 La regla de los tercios  Es quizá la regla más básica y conocida en fotografía. Da los centros de atención o puntos fuertes del encuadre.  Y tendrá mucha más fuerza y la fotografía será más armoniosa.  Si existiese un sujeto secundario debería colocarse en el punto opuesto diagonalmente.

 La ley del horizonte La ley del horizonte no es exactamente una ley por si sola, si no más bien una aplicación de la regla de los tercios a la fotografía de paisaje. Si queremos dar prioridad al cielo debemos situar el horizonte en el tercio inferior. Si queremos darle más importancia a la tierra tenemos que situar el horizonte en el tercio superior. En caso de que nuestra intención fuese conseguir una simetría, el horizonte se situaría en el centro.

La proporción áurea  la regla de los tercios no es más que una simplificación de la proporción áurea.

  Como usar la ley de la mirada, la repetición de elementos y los colores para enriquecer nuestras fotografías. Como siempre, no os olvidéis de compartir, y si os surge alguna duda preguntadla aquí en los comentarios, estaremos encantados de contestaros lo antes posible!

Composición (III)

La ley de la mirada
Esta  dice que el espacio que hay delante de la mirada de nuestro sujeto tiene que ser mayor que el de la parte de atrás; este espacio en blanco o espacio negativo se conoce como aire. Dejando aire delante de nuestro sujeto el retrato está equilibrado
 Si no dejamos aire delante del sujeto este parece que va a salir del encuadre
Por otro lado, la mirada es un poderoso elemento que podemos usar en nuestra composición para guiar la vista del espectador en la dirección que más nos convenga dentro del encuadre. Debido a la fuerte atracción que ejerce el rostro humano dentro del encuadre, nos fijamos rápidamente en cualquier cara que aparezca con nitidez en una fotografía. Si esta persona fotografiada está contemplando algo, nuestros ojos siguen instintivamente la dirección de su mirada, para saber que es lo que capta su atención.

La repetición de elementos (ritmo) y los patrones
resultan un elemento que aporta gran atractivo. La clave para realzar los patrones de repetición es aislarlos de lo que tienen alrededor.
 Podemos ayudarnos de teleobjetivos para comprimir los planos de la imagen y aislar los patrones, buscando el ritmo.
La forma más común y llamativa de conseguir la repetición de elementos es mediante las formas de los mismos, aunque la repetición de lineas, tonos, colores, etc. también da muy buen resultado.
A la hora de capturar el ritmo en una fotografía podemos hacer básicamente dos cosas:

·         Enfatizar la repetición: llenar el encuadre con un patrón repetitivo produce la impresión de que este se perpetúa hasta el infinito. Como hemos dicho antes la clave es usar un teleobjetivo, y aislar el patrón de su entorno.

·         Romper el ritmo: podemos introducir un elemento que rompa el ritmo de nuestro patrón añadiendo algo que contraste en forma, color, textura, etc. Normalmente añadiremos este sujeto que rompa la repetición en uno de los puntos fuerte de la regla de los tercios, para que nuestra composición quede más atractiva.

El color

El color y en particular los colores fuertes son un elemento importante para atraer la atención.
 Los diferentes colores son percibidos por el ojo humano de distintas formas, y evocan distintos sentimientos. Colores cálidos como el rojo denotan energía y calor, mientras que los colores fríos como el azul tienen un efecto más calmado y relajante.
Generalmente podemos atraer fácilmente la atención del espectador con un color saturado o intenso, y mantenerla por un cierto periodo de tiempo. Podemos usar los colores para crear sensaciones en nuestra fotografía. Contrastes fuertes, especialmente entre colores primarios (rojos, amarillos, y azules), son efectivos para evocar dinamismo y movimiento.
 Combinaciones de tonos en el mismo rango, especialmente tonos pastel o más lavados pueden crear una atmósfera más romántica, mientras que las combinaciones de tonos naturales, como verde, marrón, etc. son adecuados para producirnos un sentimiento de estar en la naturaleza.
Los tonos azules aportan calma y tranquilidad

 Es importante aquí resaltar el concepto de colores complementarios, y como la combinación de estos aporta armonía a nuestras imágenes, pero no me voy a extender ahora en este tema, ya que lo hemos visto con más profundidad en nuestro artículo sobre los colores complementarios en fotografía, el cual os recomiendo encarecidamente que leáis ahora.

Elementos impares, el espacio negativo y la técnica de enfoque-desenfoque.
Composición (V)
Enmarcado natural
Cuando hablamos de enmarcado natural nos referimos a una técnica donde se usan elementos propios de la fotografía como marcos “internos”, es decir para enmarcar otro sujeto de la misma fotografía. Estos marcos pueden ser naturales como arboles, cuevas, etc. o bien, hechos por el hombre, como puertas, ventanas…
 Debemos usar el marco para transmitir profundidad a la imagen. Para ello hay principalmente dos formas: la luminosidad y la profundidad de campo.

En el caso de la luminosidad podemos oscurecer el marco con respecto al sujeto principal de la imagen, dando así sensación de estar en distintos planos.
También podemos obtener este efecto usando la profundidad de campo,  en este caso se trataría de dejar desenfocado el marco, mientras el elemento principal está en foco.
Podemos usar muchos elementos para enmarcar una fotografía, incluso algunos no tan inmediatos, como pueden ser personas o animales. 

Altura y perspectiva

La altura desde la que encuadramos o punto de vista tiene gran influencia el la percepción que se genera de nuestras fotografías. Aunque hay más, los principales puntos de vista que podemos encontrarnos en una fotografía son el normal (a la altura de nuestros ojos), elevado o picado (foto hecha a mayor altura que el sujeto) y bajo o contrapicado (foto hecha a menor altura que el sujeto).
Cada una de estas alturas nos evocan una sensación diferente al ver la imagen.

·         El nivel normal generalmente sirve para mostrar o describir algo de manera natural u objetiva y transmite una sensación de estabilidad y tranquilidad, por ser la altura más parecida a la que nosotros vemos el mundo.

·         El nivel elevado provoca que el sujeto se vea disminuido en tamaño. En general, este ángulo se usa como recurso compositivo para restar importancia o transmitir una sensación de debilidad o humillación. Es usado a menudo en fotografía de niños y fotografía documental para mostrar la vulnerabilidad del sujeto.

·         El nivel bajo muestra al al sujeto engrandecido visualmente, con lo que se logra transmitir mayor importancia y una posición dominante en relación al espectador. Básicamente se emplea, para fotografía arquitectónica y de deportes, especialmente aquellos estilo descenso en mountain bike, snowboard, etc.

También hay fotografías con ángulos totalmente cenitales o en nadir, pero son menos frecuentes.
En cuanto a la perspectiva, debemos señalar que es un recurso muy importante para dotar de profundidad y atractivo a nuestras fotografías, ya que se encarga de dar sensación de tridimensionalidad y volumen a los objetos fotografiados.
La disminución de tamaño de objetos iguales aumenta la sensación de profundidad, igualmente las líneas convergentes son un elemento importante para señalar la perspectiva, aportando la sensación de primer término y fondo.
Las líneas de la balaustrada y los bancos cada vez más pequeños nos proporcionan la perspectiva.
El mismo objeto presenta diferentes perspectivas si se fotografía desde la altura de los ojos, desde arriba o desde el suelo, como acabamos de ver, y como consecuencia de esto cambia la percepción de la escena.

La escala es también una manera muy usada de aportar perspectiva, si disponemos dentro del encuadre un objeto o persona cuyo tamaño nos es familiar, nos puede servir para hacernos una idea del tamaño de los demás elementos de la imagen.
La persona sentada en el fiordo nos da una referencia para saber el tamaño del mismo.
Y no podemos acabar de hablar sobre la perspectiva sin hacer mención a un tipo “especial” de perspectiva usada a veces en fotografía, me refiero a la perspectiva forzada.

 La perspectiva forzada es una ilusión fotográfica generalmente utilizada para hacer dos o más objetos parezcan tener un tamaño diferente que su tamaño real. Este efecto se da gracias que, aunque nosotros intentamos darle profundidad por medio de la perspectiva, las fotografías son en dos dimensiones, lo cual nos permite jugar con la posición de los elementos en el encuadre para obtener este tipo de perspectiva.
Equilibrio y peso visual
El equilibrio es una técnica de composición fotográfica que contrapone elementos dentro del encuadre, de modo que todos los elementos tienen igual peso visual,  es decir, son igual de importantes y atraen la atención de la misma manera.
Hay elementos que atraen más la atención que otros, y por eso debemos ser conscientes de donde situarlos en la fotografía. Por ejemplo, los ojos, las cosas brillantes o muy coloridas, los objetos grandes y contrastados, las caras y la escritura tienen un fuerte peso visual, atraen la mirada rápidamente.
Si situamos estos elementos todos en el mismo lado de la imagen, la imagen estará desequilibrada, ya que habrá muchos puntos de interés en un lado, y poco que ver en el otro. Si queremos una composición equilibrada y que nos de una sensación agradable debemos situar los elementos de peso en equilibrio dentro del encuadre.
Podemos ver la disposición de elementos de interés (en este caso personas) de forma equilibrada por el encuadre.
Esto no tiene que ser siempre lo que hagamos, es decir, a veces preferiremos destacar un elementos sobre el resto (como ya hemos visto) o proponer una composición desequilibrada para generar cierta inquietud en el espectador, una inquietud que muchas veces notamos pero no vemos de forma obvia de donde procede.
Para conseguir el equilibrio no siempre ecesitaremos elementos que hagan de contrapunto a nuestro elemento principal, a veces simplemente el buen uso del espacio negativo nos permitirá equilibrar la imagen de forma adecuada.
A pesar de haber solo un elemento principal, la foto esta compensada gracias al buen uso del espacio negativo, que es muy amplio y tiene un peso importante en la imagen.

 
Composición (VI)
Simetría
“una figura tiene simetría si se puede rotar sobre un punto central y conservar la misma apariencia en por lo menos dos posiciones. Por lo tanto, al rotar la figura, esta mantiene su forma o es congruente con la figura inicial. Se dice, entonces que la figura tiene simetría rotacional.”
La simetría en fotografía es una técnica basada en crear una imagen que puede ser dividida en dos partes (casi siempre horizontal o verticalmente), de forma que ambas partes son iguales o muy similares. La simetría ha sido usado en el arte desde hace mucho tiempo, para conseguir transmitir armonía y equilibrio. Puede ser vertical, donde las mitades derecha e izquierda son iguales, u horizontal, cuando las partes iguales son las de arriba y abajo. nos transmiten tranquilidad y equilibrio.
 Hay dos elementos que debemos tener en cuenta a la hora de fotografiar simetrías, una composición cuidada y un punto de interés en el encuadre.
El reflejo en el lago y el horizonte centrado nos dan la simetría.
 No debemos abusar de las simetrías, ya que si no nuestras fotos serán demasiado iguales, estáticas y aburridas.

Una técnica que funciona muy bien con este tipo de composiciones simétricas es, paradójicamente, romper la simetría. La introducción de algún elemento que rompa la simetría de la imagen nos dará un punto de interés fuerte a la foto, y hará nuestra composición mucho más atractiva.
Llenar el encuadre
Si llenar el encuadre es una técnica que se usa en contraposición a la del espacio negativo. Recuerda que la fotografía es un arte, y que tu decides como será tu imagen final, Cuando estamos haciendo una foto, debemos definir cual será el sujeto principal de nuestra foto, y donde situarlo. Una manera de darle protagonismo al sujeto y eliminar todas las distracciones que pudiese haber en el fondo es llenar el encuadre con nuestro protagonista.
Esta técnica es particularmente importante cuando sacamos retratos de gente, donde queremos resaltar las expresiones faciales o algun pequeño detalle por encima de otra cosa.

jueves, 12 de febrero de 2015

12-2-2015 El Plano holandes


 

  El  plano  holandés  cómo  y  cuando  utilizarlo
Aunque surgió en el cine, pronto pasó a ser una técnica de composición fotográfica más. Básicamente consiste en girar tu cámara para que tu horizonte fotográfico pase a estar deliberadamente caído, por qué se utiliza y qué aporta a nuestras fotografías.
El plano holandés consiste en olvidar la teoría de la regla del horizonte
Es aparente que el horizonte no está recto, sino que sufre una clara inclinación hacia la esquina inferior izquierda de la fotografía.

El Porqué Del Plano Holandés

En ocasiones, y no me lo negaréis, habéis hecho uso del plano holandés, puede que sin saberlo, porque no os cabía el sujeto en la imagen, habéis girado vuestra cámara para aprovechar la diagonal, que como sabemos es más larga que los dos lados del encuadre, ¿verdad?
La verdadera razón del uso del plano holandés radica en el papel de las diagonales en la composición, que, como sabes, ofrecen velocidad, dinamismo, tensión a la composición y, además, suponen una fantástica guía para conducir la mirada a través de la fotografía.
En la fotografía superior, se aprecia claramente cómo se ha girado el encuadre hacia el lado derecho, consiguiendo una mayor sensación de movimiento, si cabe, en el tren e incluso en la chica que aparece retratada en el mismo.
Esta sensación de movimiento la aporta la diagonal trazada por el propio tren y la línea blanca que delimita la posición de seguridad en la que situarse y que aparece reflejada en las ventanas del tren.
Esta toma, si la línea trazada por el tren fuese horizontal, o vertical, sin lugar a dudas, tendría un significado completamente distinto, de ahí la importancia del plano holandés y su significado en composición.

Algunas situaciones en usar el plano holandés
Como con todas las técnicas, mi recomendación es que a partir de ahora no te pongas como un loco a utilizar este tipo de plano, lo importante es saber cuándo puede resultar oportuno su uso. Aquí van algunos ejemplos:

1. Fotografía de arquitectura. Al contar con numerosas líneas, el plano holandés convierte a muchas de éstas en diagonales, permitiendo dotar de dinamismo a algo inerte como un edificio y facilitando el recorrido de la imagen.

2. Fotografía deportiva. Ciclistas, moteros, e incluso corredores saldrán muy beneficiados con el uso de este plano al contribuir con una mayor sensación de movimiento a la toma.

3. Fotografía social. La inclusión de personas y motivos de ámbito urbano ven incrementado su dinamismo gracias a las propiedades que aporta el plano holandés a las tomas.

Y, por supuesto, en cualquier tipo de imagen en que busques que las líneas diagonales generadas gracias al giro de este característico plano, te ayuden a recorrer tu imagen.
Como has podido ver, no son pocas las situación en que, si lo deseas, puedes sacarle





 

12-2-2015 Fotos con fondo desenfocado


 
Consejos de fotografía rápidos.
Como conseguir un fondo desenfocado en tus fotografías.

El sujeto o motivo principal están perfectamente enfocados y, el fondo aparece totalmente difuminado o desenfocado.  Este es un “efecto” producido por una reducida profundidad de campo( espacio nítido que podemos percibir en nuestras fotografías)

 Apertura de diafragma: Para empezar a reducir la profundidad de campo tendrás que abrir el diafragma a la mayor apertura que te permita tu objetivo.

Puedes usar el modo manual (M), seleccionar ese valor y compensar con una velocidad de obturación adecuada, o bien, utilizar el modo de prioridad a la abertura (A ) de tu réflex, colocar el diafragma y dejar que la cámara se encargue de la velocidad de obturación.

 Los objetivos más luminosos, son los que te permitirán conseguir profundidades de campo menores a igualdad de longitud focal.

  Distancia hasta el motivo enfocado: Este es el parámetro más barato (no necesitamos un   objetivo luminoso) y realmente efectivo. Cuanto más cerca nos encontramos del sujeto, más corta será la profundidad de campo. Acércate lo máximo posible a tu motivo principal y verás que la profundidad de campo se reduce muchísimo, permitiéndote conseguir el efecto de desenfoque de fondo.

 Longitud focal utilizada: A mayor longitud focal, menor será la profundidad de campo. Si tienes un zoom prueba a realizar las fotografías con la mayor longitud focal que te permita la escena, conseguirás que el fondo aparezca difuminado, haciendo destacar al sujeto.

La longitud efectiva de la profundidad de campo es la consecuencia de la combinación de todos estos parámetros, que puedes intentar optimizar en función de las posibilidades de tu equipo para lograr que tus fondos tengan el aspecto borroso que buscas.

Abre el diafragma, utiliza una longitud focal larga y, sobre todo, acércate más.

Este es el resumen de todo el párrafo anterior, sobre todo, te recomiendo que te acerques más al motivo fotografiado, lo máximo posible si crees que tu equipo fotográfico te está limitando a la hora de conseguir una profundidad de campo reducida, sólo con ese gesto podrás disminuir drásticamente el espacio nítido de tus fotos. Después apóyate en la apertura de diafragma más alta que te permitan tu objetivo y la intensidad de la luz y, por último, si estás usando un zoom úsalo en la longitud focal más larga que puedas.

Si quieres ir un poco más allá y comenzar a disfrutar de la fotografía con otras herramientas puedes pensar en adquirir un objetivo luminoso.

La foto de arriba se realizó a f/2.2 lo que me dio una profundidad de campo aproximada de 1cm, si hubiese cerrado el diafragma hasta f/5.6 la profundidad de campo sería de algo menos de 3cm (igualmente escasa) y también habría servido para conseguir un fondo desenfocado y un retrato interesante. Esto significa que estar muy cerca de Michelle, a unos 50cm, es lo que me permitió desenfocar el fondo sin necesidad de otras consideraciones, utilicé una longitud focal normal y podría haber cerrado el diafragma para conseguir ese mismo retrato.

Consejo adicional, distancia entre el modelo y el fondo.


Si estás fotografiando un objeto o persona al que puedas cambiar de posición y no tienes un objetivo muy luminoso, de una longitud focal larga o no te puedes acercar lo suficiente por la composición que quieres realizar,  puedes intentar separar todo lo posible a tu sujeto del fondo, con eso conseguirás que este quede fuera del “alcance” de la profundidad de campo logrando que aparezca desenfocado en tus fotografías.