5 Esquemas Iluminación Para
Aprender con la luz natural
Proponerte un ejercicio que te ayude a entender mejor la luz natural. ¿Quieres? Sólo
necesitarás tu cámara, una ventana y un modelo que se preste al “experimento”.
¿Preparado?
Cómo Se Comporta La Luz?
Como sabes la iluminación natural y
la de estudio es que la primera es mucho más difícil de modificar a tu antojo, hacer más difusa la luz para conseguir la
dirección, intensidad y tonalidad que desees en tus fotografías.
Por tanto, con luz natural el que debe moverse es el fotógrafo y el sujeto
retratado, el ejercicio que te propongo va a consistir en probar distintas
posiciones frente a una ventana para ver cómo se comporta la luz.
A continuación te muestro algunas de estas distribuciones para que
imites en casa y puedas ver cómo actúa la luz.
Como deducirás de los parámetros de configuración, yo no lo hice con una
ventana especialmente grande, ni en un día muy luminoso. No obstante, no es
problema. Si tu situación es similar, sólo será cuestión de elevar la sensibilidad
ISO de tu cámara para lograr una correcta exposición, ya sabes.
El objeto no es lograr imágenes perfectas y libres de ruido, sino observar
los resultados que ofrecen las distintas opciones de iluminación.
Posición 1: Iluminación lateral y foto de frente
El primer esquema de iluminación es un clásico. Se sitúa al sujeto cerca de
la ventana con sus hombros formando un ángulo de 90º con respecto a ésta.
El fotógrafo se sitúa en posición opuesta al sujeto y toma una imagen
frontal de éste, que presenta una parte de la cara correctamente iluminada y la
otra repleta de sombras.
Si no te gustan las
sombras de la parte de la cara no iluminada por la ventana, existe una opción
muy sencilla. Se trata de compensar esas sombras utilizando un reflector en el lado opuesto de la ventana.
Como puedes ver en la
imagen superior, a pesar de estar compensadas las sombras con el reflector, aún
se aprecia un poco más de sombras en la parte izquierda de la cara de la niña.
En función de la intensidad de iluminación que se desee, bastará con acercar
o separar el reflector.
Por supuesto, este
comentario sobre la cercanía o lejanía del reflector como modo de incrementar
la intensidad de la luz que refleja, es completamente válido también para la
iluminación principal de la ventana. Es decir, si sitúas al sujeto más cerca de
la ventana la intensidad de la luz que actúe sobre el sujeto será superior.Posición 3: Iluminación lateral y foto de perfil
En este caso buscamos una fotografía de perfil, por lo que habrá que
situarnos a un lado del sujeto y no de frente. Además, para evitar unas
sombras demasiado pronunciadas en el lado no iluminado, como comentábamos
anteriormente, situaremos al modelo en un ángulo inferior a los 90º.
Es posible que no me haya explicado demasiado bien, así que mejor
utilizamos un esquema, ¿te parece?
Como puedes imaginar, la siguiente posición que te voy a recomendar es
idéntica a esta última, pero con el reflector corrigiendo las sombras
creadas en el perfil no iluminado.
Veamos el esquema al que me refiero y también, por supuesto, el resultado
logrado.
He querido dejar para este último caso la iluminación que a priori
podría ocurrírsenos a todos en primer lugar. Se trata de una toma en la que el
sujeto se sitúa de frente a la ventana y el fotógrafo toma su rostro
también de frente a éste, o bien ligeramente ladeado para no tapar la luz de la
fuente.
No obstante, permite ilustrar las variantes que se pueden lograr con un
pequeño giro de cabeza del sujeto (de ser más pronunciado este giro, nos
situaríamos en alguna de las posiciones anteriores).
Ahora practicar
He utilizado (una ventana, una cámara y un reflector).
Simplemente he
pretendido invitarte a seguir jugando con la luz para poder, ir descubriendo cómo se comporta y saber
utilizarla en tu provecho. Eso sí, es cuestión de paciencia y mucho ensayo y
error.